Cómo prepararse para los exámenes

Muchos estudiantes se enfrentan estos días a los temidos exámenes de recuperación de septiembre, por ellos os dejamos algunas recomendaciones que os ayudarán, con vuestro esfuerzo, a superarlos. 

Exámenes de recuperación

Esta última oportunidad de aprobar las asignaturas pendientes provoca más estrés que los exámenes en otras convocatorias ordinarias. Esto, sumado a la pérdida de hábito de estudio durante el verano y el esfuerzo extra de recordar todo lo aprendido durante el curso, incrementa las emociones negativas en los estudiantes que tienen que pasar los últimos días de verano pegados a los libros a la luz de una biblioteca.

Por ello es fundamental llevar a cabo unos hábitos saludables durante este periodo de concentración y sobreesfuerzo tanto físico como mental y psicológico. Hay que prestar especial atención a la dieta, que debe ser especialmente ligera antes de comenzar a estudiar. Muchos estudiantes recurren en estas fechas a la comida basura, ya que comen fuera de casa y en el menor tiempo posible. Los expertos recomiendan recurrir a alimentos que ayuden a la memoria y la concentración, invitando a tomar algún aperitivo que contenga glucosa durante las horas de estudio y en los momentos previos al examen.

Respecto a las horas de sueño, es un error habitual entre los estudiantes descansar poco y tomar muchas bebidas estimulantes. Este tipo de bebidas, como el café y los refrescos energéticos provocarán un efecto rebote, ya que retrasarán el sueño pero hará más notable el cansancio y la consecuente falta de concentración. Debemos por tanto dejar a la mente descansar para que asimile la información aprendida y, sobretodo, que la afiance. Las horas de sueño deben ser las que cada cuál necesite.

Una buena y realista planificación del volumen de material y el tiempo del que disponemos antes del examen es clave. Organizarse, plantearse pequeñas metas, tomarse los descansos correspondientes… en definitiva, realizar una rutina de estudio, empezando por los temas más complicados y dejando los más amenos para el final.

La zona de estudio debe ser por lo general siempre la misma, cumpliendo con unas condiciones adecuadas de ventilación e iluminación. Dejar de lado las distracciones como móviles o internet, evitar interrupciones innecesarias y mantener una actitud positiva y de éxito son otros de los trucos que nos van a ayudar a tener la buena nota que nos merecemos en estos exámenes.